Las promotoras inmobiliarias piden bajar al 4% el IVA para la compra de una primera vivienda. Así como recuperar las deducciones que tenía en el IRPF tanto para compradores como para el alquiler. Estas fueron eliminadas en los años 2012 y 2013.
Así lo incluye la patronal del sector APCE en el decálogo de medidas diseñado para impulsar la actividad del sector tras la crisis. Para garantizar el acceso a la vivienda, fomentar la generación de empleo y contribuir a impulsar la economía.
En cuanto al facilitar el acceso a la vivienda, la patronal pide «estimular» la compra de pisos mediante la articulación de avales y líneas de crédito en los préstamos para primera casa.
Según la APCE, se trata de una medida ya adoptada en otros países. Reino Unido es uno de ellos. Mediante el programa ‘Help to Buy’ se ha aumentado la compra de nuevas viviendas. Y facilitado el acceso de los jóvenes a través de avales del Estado.
Respecto al fomento del empleo, particularmente también en el caso de los jóvenes, las promotoras inmobiliarias proponen constituir bolsas de empleo en colaboración con el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Y el desarrollo de una Formación Profesional Dual de calidad en la próxima reforma educativa, «que funcione como dinamizador de la inserción laboral de los jóvenes».
En el ámbito de la administración, la patronal inmobiliaria reclama recortar burocracia. Y agilizar, en definitiva, el proceso de concesión de licencias de obra y urbanísticas, algo que aseguran redundará en el abaratamiento del precio de las casas.
También piden diseñar un nuevo plan estatal de vivienda adaptado a la nueva situación. Que incluya movilización de suelo público para construir nuevas viviendas. Y una actualización del precio al que se pueden vender o alquilar los pisos de protección oficial.
En este punto, llama a fomentar la colaboración entre la iniciativa privada y pública. Especialmente en lo que al fomento de la vivienda en alquiler se refiere.
Por último, APCE aboga por constituir una mesa de trabajo para definir la forma en que el sector puede contribuir a mitigar los efectos de la crisis. Y poner en marcha acciones que aprovechen su capacidad logística para atender situaciones de emergencia social.
El sector de la promoción y venta de viviendas realiza estas propuestas al considerar que será uno de los «principales vectores de tracción económica en el corto y medio plazo, dada su capacidad para estimular la economía y generar puestos de trabajo en el corto plazo». Y, por ello, «con el fin de contribuir a que el retorno a la normalidad económica y laboral, sea lo más ordenado y ágil posible«.
Las inmobiliarias suman estas propuestas a las iniciativas que han implementado desde que estalló la crisis, que les ha impactado mediante la paralización de obras durante quince días y un descenso de las nuevas preventas.
Entre las medidas abordadas destaca la moratoria de dos meses en los pagos a cuenta de sus clientes. O la articulación de instrumentos telemáticos para comercializar sus promociones online.